Manten la llama de la primera sonrisa, la caricia innata del abrazo que precises, lo increible del sueño que te rima y la tinta que tu siempre necesite. Manten la fuerza vestida de alerta, la puerta abierta a los días de sol, el aroma en flor que tu alma lleva y la luna llena para noches de amor. Manten el paso en senderos verdes esperanzas fuertes donde el cansancio es más, la mirada vital latiendo en siempres y que el corazón se llene de Navidad. Esencia

viernes, 12 de junio de 2009

DICESE EN LA ESPERA







Dícese en la espera, cuanto se desea esa bocanada que, como agua, cala por donde pasa, hasta dejarte marca incluso donde no llega, pero dícese que es placer, y si así es, prendo un cigarro sin saber fumar, cuando me siento a esperar tu mirada, cuando ansío esa cruzada que me quema más que el humo, y resurjo de donde no me sabía, sintiendo la vida entrar como susurro por cada bulbo que crece en mis tripas... ansiarte me delira, amarte, se goza, y se siente gota a gota cruzarte las arterias, sangrando en verbena la ilusión de saberme donde me tienes y dode me esperas. Fumo los poemas que me desvisten, los que impliquen mi aroma en sus venas, los que llevan tu amor en su tinta, los que te dicta el fervor fiel de tus venas. Dícese en la espera que se siente como serpentean pisando los talones de la inquietud, todo un alud de sensaciones, todas las emociones precoces y tardías, las que anochecen el día y pintan sol a las noches, las que conocen el donde más hondo que se agita, en la espera maldita que bendigo con tu nombre. Dícese que el tiempo manda, que se hace bufanda ahorcando el aliento, cuando es puro sentimiento el que espera ver su vida entera dentro de un abrazo sin promesas ni contratos que prediquen alegatos por encima del sentir, pues no hay más viabilidad que este latir que te espera acelerado.


Esencia